Picota de Presencio

Picota de Presencio

jueves, 11 de noviembre de 2010

EL SETENTÓN FALTÓ A LA CITA

Todas las parejas de la pandilla estaban atentas a la llegada del nuevo setentón, todas las mujeres pendientes de la comparación hiriente, del, en apariencia más joven, pelo negro y además abundante, tez morena y nada de arrugas en su cara, todo hacía presagiar censura desfavorable para el resto de los "niños", pero hete aquí que el setentón no llegó, qué alegría, qué ilusión, pensamos todos en nuestro interior, sin embargo exteriorizamos amargura y pesar, faltaba él.

Hubo quienes pensaban que su aspecto se debía a la menor cantidad de años acumulados, pero tanto el Calvo como el Bardo, en un ejercicio de "sincero" afecto, y por no dejar semejante error flotando en el ambiente, tuvieron a bien aclarar, que ni era tan joven, ni el pelo era suyo, ni el color era natural y lo de la tersa piel se debía, hicimos votos, se recomponía con los botos.
Cuando todo esto se aclaraba, para desengaño sobre todo de ellas, el gran alcalde, ya va siendo hora de subir su nombramiento, tomando la palabra leyó su penúltimo poema, con olor a jazmines de Kenia, improvisó un alegato de bienvenida a las compañeras sufridoras de todos los presentes, meloso y harto cariñoso, como se desprende siempre de su acusada personalidad, lástima que la suya propia no pudiese haber disfrutado de momento, ausente por causa de fuerza mayor, y lo mas sentido, sendos mensajes de Ramis y ¿quién más?, el SETENTON. Cariñoso poético y ocurrente como es siempre él.
La reunión fue encantadora como siempre, pero con mucho más glamour y frescura gracias a la inestimable compañía de nuestras queridas mujeres.

El Bardo

No hay comentarios:

Publicar un comentario